No estoy enojada contigo. A veces pienso cosas feas: que me has abandonado, por ejemplo.
Pero sé que no es así, jamás lo has hecho y nunca lo harías.
Permanezco estoica por y gracias a ti. Me enseñas tanto.
No hay peor vacío que sentir tu ausencia.
No hay peor momento que vivir tu ausencia.
Todo este año he ido rememorando el año pasado.
Este mes es el que más disforia me ha dado,
revivir tu último mes.
Por favor, ayúdame a soportarlo.